Una inocente victima de la irresponsabilidad de los chóferes cobró la vida de un menor de edad en el distrito de Imperial.
Cuando muchas familias se reunían en sus casas a almorzar, el menor Mauricio Hinojoso Barrios de 3 años de edad dejaba de existir al caer bajo las llantas de un pesado camión que distribuye bebidas gaseosas.
El reloj marcaba la 1:05 minutos cuando se escucha una brusca frenada entre las calles Atahualpa y Ayacucho. Se trataba de un camión que distribuye gaseosas que embistió al pequeño Mauricio. Las llantas posteriores pasó sobre su pecho y parte de la cara, provocando su muerte inmediata.
La zona, que se caracteriza por ser una de las mas tranquilas de Imperial, se vio enseguida alborotada y llena de bullicio, especialmente de los gritos desgarradores de la madre del menor que estaba al lado del cuerpecito inerte. Parecía que el angelito estaba durmiendo pero ya no respiraba, ya no podía seguir corriendo y saltando al jugar con sus familiares en casa. Un cuadro por demás conmovedor que impactó a más de un curioso que se dio cita al lugar.
Casi 10 minutos después del accidente se hicieron presentes personal de la Policía Nacional del Perú como de Serenazgo de la Municipalidad de Imperial, pero ya poco pudieron hacer mas que detener al irresponsable chofer de nombre Juan de Dios Quispe y en un intento por aferrarse a su hijo condujeron al padre junto al menor a un establecimiento de salud, donde solamente corroboraron la muerte del niño.
Los familiares piden que le caiga todo el peso de la ley al irresponsable chofer ya que no tiene excusa alguna, toda vez que esa calle donde sucedió el accidente es tranquila y ni siquiera había vehiculo alguno estacionado que pudiera impedir la visibilidad o interponerse para realizar alguna mala maniobra.
El chofer y su camión permanecían en la comisaría de Imperial a la espera del accionar de las autoridades del Ministerio Público, mientras que el niño fue llevado a la morgue para la necropsia de ley y ya en horas de la noche su cuerpo era velado en su vivienda, al lado de sus familiares y vecinos.
es una pena este sensible acontecimiento, pero tenemos que reconocer que la irresponsabilidad no es solo del chofer sino, de la madre !Que hace un niño de 3 años en la calle!.por favor padres y madres de familia cuiden a sus hijos no los dejen solos la responsabilidad es tambien de ustedes.
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