
El evento adverso se produjo en el tercer piso de la vivienda, ante la sorpresa de los dueños de la misma y de los vecinos que rápidamente apoyaron con sus baldes con agua para controlar el fuego, que felizmente no se extendió a otro ambiente ni a las viviendas colindantes, pero que sí consumió todo lo que había en la habitación.
Cuando ya las llamas de fuego habían sido controladas por los dueños de casa y los vecinos, llegó la unidad de los Bomberos desde San Vicente que subieron hasta el tercer piso para mojar las paredes y que no revivan las llamas del fuego.
Consultados sobre el motivo del incendio, los dueños no supieron dar razón y los efectivos de rojo iniciaron las indagaciones e inspecciones respectivas para dar con el motivo del evento adverso que solo ocasionó daños materiales y no personales.
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