Como se recuerda, la citada servidora de
El caso “nació”, cuando Apolaya Hidalgo apoyó en el llenado de unas declaraciones juradas a unos contribuyentes cometiendo-involuntariamente- errores en la consignación de datos de unos formatos rectificatorios , tal y como lo demostró con el Informe Nº 25-2009-CAH-UATOC-MPC.
Precisa en su defensa Apolaya Hidalgo que el trámite efectuado no altera en lo absoluto en el pago del impuesto predial y no afecta económicamente a
En declaraciones al sintonizado Magazine Dominical LA VENTANA de Cañete TeVe-Canal 31, la citada servidora acepta y reconoce su error involuntario así como la sanción impuesta en su contra aclarando que en ningún momento le han aperturado proceso administrativo alguno.
“Luego de mi sanción me pusieron a disposición superior para otra dependencia, el cual debía acatar pero mi propio superior no lo creyó por conveniente dada la importancia y responsabilidad que asumía en el área, tal y como quedó escrito en un informe Nº 040-2009-SGAT del Sub Gerente de Administración Tributaria remitida al jefe de personal; lo que dice mucho de mi capacidad y buen rendimiento”, indicó.
Sobre el particular, se armó otra patraña tratando de mal informar que no quería ser removida de su cargo, sin embargo el propio informe dice lo contrario. Pese a todo, para evitar mas entredichos, laboró en su área hasta el último viernes 14 de agosto y pasará a partir de mañana lunes
Es importante enfatizar que la opinión de asesoría jurídica de la propia municipalidad cañetana precisó que “no existe la responsabilidad penal ni civil por parte de la servidora pública Carmela T. Apolaya Hidalgo, por los hechos cometidos el día 04/06/2009”; en buen romance limpia de polvo y paja.
Apolaya Hidalgo tuvo que soportar estoicamente una andanada de críticas y calumnias de parte de quienes, sin remitirse a las fuentes fidedignas ni permitirle el derecho a replica, lanzaron al aire y escribieron medias verdades mal informando a la población, vendiendo escándalo. De ahí que acudió a nuestro medio a decir su verdad y entregar a la población lo que realmente ocurrió en este “sonado caso”.
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