Un voraz incendio redujo a cenizas un depósito de cajones de madera ubicado en El incendio se produjo alrededor del mediodía, por causas desconocidas, cuando se pudo apreciar las primeras lenguas de fuego. Inmediatamente los propietarios del depósito que viven en el mismo lugar trataron de controlarlo pero el material al ser altamente inflamable no les permitió hacer mucho.
En la desesperación llamaron a los bomberos quienes se encontraban en esos momentos en una ceremonia de entrega de equipos en San Vicente. Pero al llegar no pudieron hacer mucho por que les faltaba agua.
Trabajadores de una empresa vecina , con manguera en mano, y con apoyo de los vecinos lograron apaciguar las llamas hasta que los hombres de rojo pudieran apagarlo totalmente.
Se temía que el fuego se propagara a otro depósito vecino y llegara hasta el mismo mercado de frutas. Inclusive se tuvo que cortar el servicio de energía eléctrica toda vez que se estaba exponiendo al fuego los cables de conducción de corriente que soportaron el fuerte calor por lo que inmediatamente intervinieron los operarios de Ede-Cañete.
Los vecinos criticaron la lentitud de la compañía de bomberos mas aún de los de Imperial ya que nunca llegaron al llamado teniendo que hacerse presente los de San Vicente, indicaron. Sin embargo fueron los de la compañía de Imperial los primeros en llegar ya que los de San Vicente arribaron 20 minutos después porque se encontraban guardando los enseres y mobiliarios que les fueron donados por el Gobierno Regional de Lima.
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