Carpio Uriquizo es un joven imperialino que creció junto a sus padres en la 5ta. Cuadra del Jr. 2 de Mayo quienes junto a sus tias Antonina Vicente y la popular Mamá Juana le inculcaron el amor, respeto y veneración a Dios, por lo que ingresó como Acólito en
Compartía sus estudios en el colegio con su presencia en la iglesia teniendo como guía al querido Padre Frutus Berzal Robledo de quien aprendió sus primeras lecciones que lo conducirían por el camino de entrega, amor, sacrificio y la gran fortaleza para seguir la palabra de Dios.
Era normal verlo en las misas acompañando al Padre Frutus. Pese a que estudiaba en un colegio estatal en San Vicente se daba tiempo para recibir enseñanzas en el Seminario Menor de Nuevo Imperial donde reafirmo su vocación.
Luego de asegurarse asimismo que la vida sacerdotal era su camino alistó maletas y emprendió viaje hacia España donde realizó los estudios superiores respectivos y al poco tiempo de retornar a su tierra Cañete es ordenado como Diácono y es destinado a
Sus padres José Carpio Vicente y Lidia Urquizo de Carpio son los mas emocionados por tan importante paso en la vida de su hijo. De aquél “pepito” hoy tenemos a todo un hombre que entrega su vida a Dios y se ordenará como Sacerdote.
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