Las graderías de
Los hinchas se comenzaron a emocionar cuando Salomón Libman y Raúl Fernández salieron a realizar la calistenia y prácticas previas al encuentro. Llegaron acompañados de su preparador el no menos conocido Oscar Ibáñez que fue largamente ovacionado por los asistentes, especialmente por Norte, recordando que fue un ídolo de Universitario de Deportes.
Luego salieron a entrenar los 11 titulares: Ramos, Ballón, Manco ( “tócame que soy realidad” comenzó a escucharse desde las 4 tribunas), Guizásola, Rengifo, “la foquita” Farfán, Zambrano, Chavez, Vilchez y “Cachito” Ramirez.
Llamó la atención la ceremonia de despedida que le hicieron al correcto árbitro peruano Winston Reátegui quien fue despedido en medio de la presencia de sus colegas que lo hicieron pasar ante un bosque de banderines, momentos emocionantes para un árbitro que fue respetado por tirios y troyanos y que en su trayectoria pocas veces se le pudo cuestionar por sus decisiones.
Las tribunas comenzaron a vibrar cuando apareció Juan Vargas, el “loco” no estaba ni como suplente debido a una lesión, pero se hizo presente para apoyar a sus compañeros. Se ubicó en una de las tribunas donde no se cansó de firmar autógrafos.
Otro que se robó los aplausos pese a no jugar fue José Carlos Fernández, el popular “Zlatan”, la tribuna Sur fue desde mas aplausos le llegaron.
Los goles llegaron ni bien iniciado el partido. Los dos goles en menos de los 10 minutos del primer tiempo. El primero de “Cachito” Ramirez tras un rebote que tomó luego de un tiro de esquina cobrado por Guisáosla que fue rechazado por un defensa “tico” que fue bien aprovechado por el jugador “crema”.
El segundo tanto fue un golazo de Hernán Rengifo que aprovechó un largo servicio que le permitió ganar las espaldas a los defensores centroamericanos que no pudieron detenerlo. El “charapa” anotó con calidad, esperó a que el golero saliera para darle el puntillazo final. Todas las tribunas saltaron de emoción y algarabía. Se pensaba que ibamos a dar una goleada, pero no fue así.
Markarian hizo los cambios necesarios para conservar el triunfo. El cañetano Wily Rivas ingresó en el segundo tiempo, no desentonó. Galliquio, Rainer Torres, Advíncula (hizo recordar al “Condor” Mendoza por su torpeza) , Jean Tragadora y Paolo de
Una buena presentación, pero aún falta más ya que el equipo con el que nos enfrentamos ayer no fue tan fuerte como para exigir a los nuestros como se esperaba.
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